he perdido el tren
Habían pasado las horas pero todo seguía igual y por el momento no parecía cambiar.
Se preguntaba cómo podía existir gente así de extraña. Gente tan lunática, con las ideas tan poco claras. Ella sabía perfectamente lo que quería y le extrañaba mucha pensar que había gente a la que no le sucedía lo mismo. Aquella mañana, como cualquier otra se había levantado con el mismo pensamiento, con la misma ilusión.
Pero sin saber aun la razón aquella mañana todo era un poco más diferente. Se sentía extraña sin ganas, apática….se estaba cansando de aquella situación. Ella lo había intentado todo, había puesto todo de su parte pero no había respuesta. Sabía que lo más posible es que, como otras veces le había sucedido, había perdido el tren. Y ahora lo veía todo bastante complicado.
Empezó a rondarle por la cabeza la idea de dejarlo todo, de olvidarlo. No era que quisiera tirar la toalla, sino mas bien dejarla colgada para otra ocasión, pues quizás aquel no era el momento.
Le parecía demasiado arriesgado pasar a la acción, pues lo que menos quería era resultar una pesada y sin embargo presentía que ya había dado esa impresión.
Al fin y al cabo no lo conocía demasiado bien, no sabía de “que pie cojeaba” y por eso no quería apostarlo todo. Por su parte se sentía bastante insatisfecha pero sabía que lo mejor era darle tiempo al tiempo y que si algo tenía que suceder, lo haría con el tiempo. Se decía estas palabras con la boca cerrada y con la ilusión de que mientras las pronunciaba algo inesperado sucediera. Pero seguían pasando las horas y los minutos y todo estaba igual. Ahora debía estar quietecita, no podía decir nada más. Solo esperar y con el tiempo olvidar.
Se preguntaba qué hubiera pasado, que sería ahora de su vida a si aquel dichoso día de principio de verano no hubiera ocurrido ningún acontecimeinto.Suponia que todo seguiría como años atrás. Sin movimiento alguno. Siempre había pensado en él desde el momento en que lo vio, pero luego lo dejaba guardado en el cajón del recuerdo y intentaba continuar su vida como fuera. Hasta el momento le había ido bastante bien. Por el día era una mujer educada, trabajadora, responsable, amorosa y por las noches su inquieta mente jugaba con el recuerdo .Le encantaba, era como adentrarse en un oasis frondoso en medio del desierto.
Sabía hacer como si nunca hubiese sucedido nada. Pero aquella última vez había sido diferente. No sabía la razón pero lo había sido. Había notado cosas que en otras ocasiones no sentís. Su vida empezaba a parecerle, insignificante, aburrida, tediosa. La detestaba en el fondo, y se adentraba cada vez más en aquel insinuante capricho que la vida le había ofrecido. Sabía a chocolate y frutas frescas y le dejaba un dulce sabor de boca. Le daba energía, magia, sorpresa, curiosidad y miedo a la vez. Era como una droga que no estaba dispuesta a dejar de probar. Estaba enganchada a aquella situación, sin control sin razón. Era adicta a sus palabras….
Maldito día-se decía –ojala nunca hubiera sucedido nada así, pues así podría haber seguido con su vida, sin sobresaltos.
Pero sucedió y volvió a suceder días después y otra vez y otra. La mantenía enganchada a base de palabras, y desplantes, de sis y de nos, de pasados y mañanas pero nunca de presentes. Aquella vez había sentido que lo tenía tan cerca….podía imaginarse con mas viveza que nunca como era el color de sus ojos, como era su aroma incluso si cerraba los ojos podía sentir sus brazos rodeándola, aunque en el fondo nunca los había sentido. Imaginaba aquel momento y millones de mariposa bailaban dentro de su estomago y su corazón se volvía como loco….se ponía tan nerviosa… pero le encantaba tanto esa sensación… y imaginando , como siempre dejo pasar la oportunidad que por aquel entonces tan cerca tenia….
Se arrepentía tanto…..ahora ya era tarde……pero no podía evitar ser una gran soñadora y quizás eso es lo que le ayudaba a vivir.
Hubiese deseado y deseaba con tanta fuerza aquel momento…le daba igual lo que durase, un segundo un minuto una noche… tan solo pedía eso ,una noche…….era solo un momento que recordaría toda su vida .
Pero a veces el destino juega malas pasadas. Tan cerca y a la vez tan lejos. Lo había estado tantas veces, tan cerca y ahora ya estaba lejos otra vez, o quizás no. No lo sabía solo sabía que cada vez se le escapaba un poco mas de ilusión y de esperanza .Quizás en el fondo ella no estaba hecha para vivir e amor, sino simplemente para escribir sobre e él, sintiéndolo a través de las palabras pero sin llegar a sentirlo nunca con la fuerza con la que ella imaginaba que existía.
Como los demás días seguiría esperando, pero quizás con otra ilusión, de otra manera. El verano se acababa y con el aquel sueño que durante unos días hizo que su corazón latiera con fuerza. Solo esperaba que aunque fuera breve, una pizca de aquellos momentos volvieran a poner en marcha aquel ya cansado corazón.
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