todo sigue igual

Desastrosa semana.Horrible.Terrorifica.Desesperante.Rutinaria.No es que aquel día se hubiera levantado de mal humor y lo viera todo negro, sino que realmente todo estaba de ese horrible color. Aun lucía el sol, y todavía era verano, pero parecía como si en su corazón de pronto se hubiera alojado el más triste, oscuro y frío invierno jamás visto. Y así era como se sentía, fría. Era como si de pronto todo se hubiera quedado congelado. De un día para otro todo se había vuelto mustio, indiferente. Todo se había vuelto del revés. Lo que parecía tan solo unos días maravilloso y genial ahora ya no lo era. Su sueño se había roto. Aun no entendía muy bien ni cómo ni porque y si quizás había hecho algo mal y por eso todo se había torcido o quizás tan solo el destino le estaba jugando una mala pasada. Muy mala, por cierto. Pero porque le tenía a que suceder esto a ella por qué? Era demasiada mala suerte junta para ser verdad. Alguien le había a echado una maldición o que…No sabía la razón pero no era para nada bonito aquello que le estaba sucediendo. Tantos sueños, tantas esperanzas, tantas ilusiones truncadas y justo ahora cuando la llegada inminente del triste otoño se anunciaba con el frío viento de las mañanas.

Como soportaría ahora aquellas largas y aburridas noches solitarias en las que solo su pensamiento positivo y sus fantasías la acompañaban??? Como iba ahora a cerrar los ojos para dormir si ya no tenía ningún pensamiento bonito para hacerlo?

Y la gran pregunta sin respuesta ni explicación lógica? Porque le tenía que haber pasado a ella justo ahora? Por qué?

Aquel pequeño defecto de darle vueltas al pensamiento sin parar la atormentaba, no la dejaba vivir. Quizás la solución era dejar pasar el tiempo y a ver qué pasaba pero resultaba difícil dejarlo todo en la cuerda floja cuando hace tan solo una semana parecía que lo tenía todo bajo control. Pues así se sentía, triste, desarmada, insatisfecha, preocupada, ansiosa, al borde de la locura quizás? Si quizás así se puede calificar a ese sentimiento que es el motor del mundo, locura. Pero aquella locura que cuando todo sale bien es positiva ahora se daba la vuelta y se convertía en negativa. No podía dormir, no tenía hambre, ni sed no era ella. No era la misma que hacía unos días, por supuesto que no.

Estos cambios de estado de ánimo acabarían con ella. .que es lo que habría pasado? Debía de haber supuesto que esto acabaría así, que acabaría llorando….tenía que haberse imaginado que una cosa así nunca podía ser buena y que le llevaría al sufrimiento. Se lo avisaba ella misma: no te hagas ilusiones….pero como buena señorita Antoñita la Fantástica, se las había hecho antes de tiempo, como siempre, de manera que ahora la caída había sido casi mortal!

Como no se iba a hacer ilusiones. Se preguntaba ella- y en el fondo tenía razón. Quien no se las hubiera hecho. Quizás alguien que haya sufrido mucho en esta vida, alguien escarmentado pero no ella. Si tan solo era una niña, una niña grande a la que la vida se lo había puesto bastante fácil (comparado con otros) y a la que todo o casi todo le había salido a pedir de boca. Alguien así es demasiado soñador, demasiado iluso para creer que algo malo le puede pasar.

De todas formas sabía que esto tarde o pronto, y como todo en la vida acabaría. Lo que no sabía era si acabaría con un final feliz o no y eso era lo que más le agobiaba.

Quizás de aquí unas horas su sino cambiaba para bien o quizás no. Podía ser de aquí unos días o esa misma noche. Dios mío que locura! La situación era bastante insoportable. Ella necesitaba una solución ya. Quería saber que es lo que había sucedido. Porque todo se había vuelto gris le aterraba la idea de un otoño triste y sin sueños. De un otoño lleno de monotonía y desazón. No lo podía creer. No podía creer que acabara llorando. Quizás lo mejor era cortar por lo sano. Olvidarse. Renunciar a lo bonito, a la fantasía, y crecer por fin como cualquier niño/a. Hacerse por fin adulto, dejar de fantasear y enfrentarse a la vida tal como en el fondo era. La vida que le había tocado vivir o que ella había elegido vivir. Al fin y al cabo ella la había elegido. La hubiese podido cambiar en su momento pero no lo hizo. Como siempre la indecisión le hizo perder otro tren y quizás este ya era el último. Era triste pero era así. Algún día había de pasar-se decía ella intentado convencerse. Lo que nunca imagino o quiso imaginar es que acabara así.

Había pasado mucho tiempo, forjando una ilusión, idealizando a alguien que quizás no era digno de serlo, pensando, soñando que algún día lo conseguiría. Y ahora estaba allí, sentada frente a su ventana azul, con las lágrimas resbalando por sus mejillas y su mente organizando recuerdos. Al fin y al cabo eso era lo único que por ahora tenia, recuerdos. Y quizás con eso debería seguir su vida.

De todas formas y para no defraudar a su espíritu infantil, aun guardaba en lo más profundo de su mente un poco de esperanza, ahora sí, guardada en un cajón y cerrada con llave para que no escapara a no ser que ella le diera permiso. Quizás estaba creciendo. Quizás eso era un paso hacia la adultez, quizás le empezaba a quedar más claro que aquello no podía ser, al menos, no en esta vida.

Seguiría esperando, pues, era a única opción que por ahora le quedaba. Seguiría bañándose en sus recuerdos cada día más lejanos y borrosos pero los únicos que tenia. Seguiría soñando que quizás algún día despertaría y todo volvería a ser como ayer .Como aquel dichoso día de verano en el que la vida le concedió el placer de conocer el amor.

Y si de algo sabía ella, si en algo era realmente experta era en esperar.En dejar pasar las horas, los días, las semanas en silencio, guardando su secreto bajo llave en lo más recóndito de su memoria. Así que eso es lo que iba a hacer, esperar. Quizás el nuevo día le trajera buenas noticias o quizás no pero algo le quedaba claro sino es hoy será mañana, porque siempre quedara mañana…….